¿Cuándo y cómo se origina en el hombre esta tendencia de escoger la dirección falsa e ilícita del amor? ¿Cuál es la causa de esta desviación? Si Dios es nuestro creador y Su ideal eterno e incambiable es la realización de un mundo unido de amor, paz y felicidad. ¿Por qué el mundo es un lugar de sufrimiento y tragedia tan diferente al ideal divino?
Nadie ha podido aclarar satisfactoriamente con profundidad y detalle estos interrogantes y ofrecer soluciones eficaces que terminaran con la tragedia y el sufrimiento humano.
De todas las investigaciones que el hombre pueda hacer, ésta es la más importante. De todos los secretos nunca antes esclarecidos éste es sin lugar a dudas también el más transcendental.
Como vamos a exponer a continuación, los extraordinarios descubrimientos que el Reverendo Sun Myung Moon ha hecho sobre este tema tienen un valor incalculable y representan una aportación esencial para esclarecer este problema nunca antes resuelto satisfactoriamente.
Sun Myung Moon inició un largo y difícil camino en la búsqueda de estos secretos y misterios tan ocultos, la mañana de pascua del 17 de abril de 1935 en una montaña del noroeste de Corea, su tierra natal.
A la edad de 15 años se encontraba sumido en profunda oración y preocupado en grado extremo por el sufrimiento que observaba a su alrededor y que lamentablemente formaba parte de la continua experiencia del hombre en el transcurso de la historia.
Jesucristo se le apareció en una visión y le mostró el curso de los eventos de su vida. Debido a la incomprensión de sus contemporáneos, la vida de Jesús estuvo llena de sufrimiento y dolor. A pesar de toda la preparación realizada por Dios en la nación de Israel, enviando profetas y señales antes de la llegada del Mesías, Jesús enfrentó el rechazo y la oposición en su tiempo, al no ser reconocido ni aceptado en su verdadero papel y posición como el Mesías. Este fracaso de la gente preparada en unirse con el Mesías esperado, les condujo finalmente a considerarlo un impostor y crucificarlo después de tan sólo tres años de ministerio público. A pesar de todo, Jesús siempre mantuvo un corazón de amor incondicional y pudo ser victorioso en traer una salvación espiritual a la humanidad a través de su ejemplo y sacrificio en la cruz.
Sin embargo, la gran esperanza de Dios y de Jesús era erradicar definitivamente en aquel tiempo el pecado y poder establecer físicamente el Reino de los Cielos. Esperanza que sigue todavía sin realizarse.
Jesús explicó al joven Moon la necesidad de que alguien asumiera seriamente la tarea de completar esta misión y le pidió tomar esta responsabilidad.
A pesar de su edad, él ya había sentido la tragedia y el sufrimiento de la humanidad, y se había determinado a dedicar su vida para remediarlo. Pero esta revelación ocurrió de repente y estaba muy asombrado. Se le pedía una decisión extremadamente difícil e importante.
En un principio él rehusó, pero finalmente aceptó. Como explicaría años más tarde a sus seguidores, él lo hizo por dos razones: Primero, si él no aceptaba probablemente Jesús no encontraría a ningún otro. Segundo, si comenzaba esa tarea por su propia determinación, siempre tendría la opción de abandonarla en un futuro, pero si hacía una promesa solemne a alguien, en este caso Jesucristo, entonces tendría que perseverar hasta el fin.
Después de esta profunda y sorprendente experiencia, todo cambió en su vida y durante los 9 años siguientes inició una intensa búsqueda de la verdad de Dios. Aunque exteriormente él continuó sus estudios, graduándose en ingeniería eléctrica, todo su tiempo libre, en esa época fue dedicado a la oración, el estudio de la Biblia y otros libros sagrados. Estaba intensamente serio y preocupado, preparándose para su misión. Deambuló por las montañas y a lo largo de los ríos, meditando, orando, investigando.
Las respuestas nunca aparecieron de una manera fácil. Tuvo que enfrentar intensas y difíciles batallas espirituales con las fuerzas satánicas del mal que querían bloquear su búsqueda de la verdad que pudiera liberar al hombre del pecado y el sufrimiento. A través de innumerables noches en oración, mantuvo comunicación espiritual con Jesucristo, Moisés, Buda y otros santos, así como comunicación directa con Dios.
Luchó desesperadamente por resolver un vasto enigma espiritual de preguntas tales como: ¿Quién es Dios realmente? ¿Cuál es Su naturaleza? ¿Cuál es Su intención y propósito? ¿Por qué creó al hombre? ¿Cuál es la relación que debe de existir entre el hombre y su Creador? Esa fue una de las cuestiones que Dios mismo le reveló en forma directa: "La verdad básica y central de este universo es que Dios es nuestro Padre y nosotros somos sus hijos. Todos fuimos creados como hijos de Dios."
Por lo tanto, él le preguntó al Padre Celestial: ¿Por qué no disfrutamos ahora de esa íntima relación como Padre e hijo contigo? ¿Mediante qué proceso, por qué razón, cuándo y por quién fue destruida esa relación? ¿Por Satanás? ¿Quién es Satanás? ¿Quién creó a Satanás? ¿Por qué Satanás llegó a ser Satanás? Si Tú eres bueno y el único Creador, ¿cómo puede aparecer el mal?, si nadie creó a Satanás, ¿cómo es que Satanás llegó a existir?
Si Dios es amor y ha enseñado a perdonar a nuestros enemigos hasta 70 veces 7, ¿por qué Dios mismo no puede perdonar a Satanás? ¿Por qué? ¿Qué es lo que Satanás pudo haber hecho, para que sea imposible incluso para Dios perdonarlo? ¿Qué clase de pecado fue cometido en el principio, que acarreó tanta tragedia a este mundo? ¿En qué consistió el pecado original? ¿Por qué nos afectó y afecta tan profundamente?
Si Tú eres todopoderoso, ¿cómo puedes permitir la existencia del mal? ¿Por qué eres incapaz, impotente? ¿Por qué?... ¿Quién es entonces, responsable de resolver el problema del mal? ¿Dios? ¿El hombre? ¿El Mesías?
Dios y Jesús habían estado esperando por alguien que pudiera exponer finalmente a la luz del mundo, la identidad y el delito oculto de Satanás, para de esta forma poder acusarlo ante Dios y juzgarlo.
Llegar a aclarar y exponer la naturaleza del pecado original, fue la tarea más compleja y difícil. Una vez que Sun Myung Moon descubrió la terrible traición cometida contra Dios y Su ideal de amor en el origen de la historia humana; el conocimiento de este secreto, fue la mejor arma para defenderse y contraatacar las fuerzas del mal, así como también la llave para ir desvelando el camino recorrido y el que falta por recorrer, para que la humanidad restaure el estado de bondad y perfección que estaba supuesta a alcanzar originalmente. Sun Myung Moon en este tiempo llegó a comprender intensamente el corazón angustiado de nuestro Padre Celestial, que sufrió y sufre constantemente por la tragedia y los pecados de todos sus hijos. Sintiendo esto él no podía parar de llorar. Aunque mucha gente abandonó a Dios, El no abandona a nadie. A pesar de su soledad y dolor, constantemente trabaja para la salvación de la humanidad.
Sun Myung Moon lloró por días enteros al descubrir la situación miserable del Padre Celestial. A veces sus ropas estaban completamente empapadas por sus lágrimas y su rostro tan hinchado que ni sus vecinos lo reconocían.
El continuó preguntando: ¿A través de qué principios Tú estás trabajando durante la historia para restaurar a la humanidad? ¿Por qué el Reino de los Cielos que Jesucristo proclamó, no se realizó cuando estaba aquí en la tierra? ¿Cuáles fueron las circunstancias y las razones por las que Jesús fue rechazado y crucificado hace dos mil años?
¿Cuándo será el fin del mundo anunciado en la Biblia? ¿Por qué tiene que venir el fin del mundo? ¿Cómo termina el mundo? ¿Será una catástrofe del universo, o no?, si no es así, ¿cuál es el significado de los acontecimientos predichos en la Biblia? ¿De qué forma y cuándo será erradicado el mal y el pecado definitivamente del hombre? ¿Cómo y cuándo se realizará el Reino de los Cielos sobre la tierra?.
Sun Myung Moon a través de increíbles luchas fue finalmente victorioso y obtuvo las respuestas a estas y muchas otras preguntas, que más tarde fueron sistematizadas y escritas por sus seguidores en lo que hoy conocemos como el Principio Divino.
El Reverendo Moon comentó en 1972 en Londres: "Estoy revelando el tema de mayor controversia en la esfera del mundo teológico actual. Este contenido no es meramente mi estudio o una investigación de la Biblia. Es una revelación, que llegó después de una intensa búsqueda y exploración en los más remotos lugares del mundo espiritual, donde obtuve las respuestas. Por lo tanto, mi deseo más serio es que no se precipiten en hacer juicios previos. Por favor, mantengan sus conclusiones y hagan sus propias investigaciones, particularmente en el mundo espiritual.
Yo conozco claramente que la ley de Dios es muy severa. Si yo proclamo algo que no es verdad, entonces sé que recibiré el juicio de la historia. He sufrido persecución toda mi vida únicamente porque estoy hablando la verdad y sólo por esa única razón. Existen dos formas de comprobar esto. Podemos confirmarlo aquí en la tierra o luego confirmar esta verdad en el mundo espiritual. Les digo esto porque deseo que lo mediten profundamente y lo consideren seriamente."
A continuación vamos a exponer algunos conceptos que nos ayuden a comprender mejor estas revelaciones sobre el origen histórico del mal y sus implicaciones en lo que tradicionalmente se conoce como: "La caída del hombre".